"Cuando la seguridad de los abogados sea amenazada a raíz del ejercicio de sus funciones,
recibirán de las autoridades protección adecuada".
(Principios Básicos de Naciones Unidas sobre la Función del Abogado, N°17)
Desde el Golpe de Estado de 2009, graves violaciones de los derechos humanos, cometidas en gran escala, han afectado profundamente a la población de Honduras. La falta de reacción del Estado a la altura de la gravedad de la situación ha sido sobradamente denunciada por los órganos de Naciones Unidas y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Los abogados no son inmunes a esta situación. La práctica del derecho es en sí misma generadora de riesgos en un contexto de pérdida total de confianza de la población hacia la institución judicial y sus diferentes actores.
18.000 abogados están inscriptos en el Colegio de Abogados de Honduras.
Entre enero de 2010 y marzo de 2015, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CONADEH) ha registrado 89 casos de muerte violenta de profesionales del derecho (abogados, jueces y miembros del Ministerio Público).
En su gran mayoría, estos asesinatos han sido cometidos por uso de armas de fuego y en al menos 82% de los casos, el o los autores de estos crímenes quedan sin castigo.
La falta de implementación, por parte de las autoridades, de programas específicos destinados a la protección de los operados de la justicia ha sido regularmente señalada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Todos reclaman al Estado que se dispongan todas las medidas necesarias para la protección de su integridad física y moral.
Con demasiada frecuencia el abogado es considerado responsable de los disfuncionamientos de la justicia o aún del hecho de que un juez se pronuncia a favor de la parte contraria. En un país donde la violencia está generalizada, toda frustración causada por la justicia es demasiado frecuentemente solucionada con ataques, incluso mortales, contra abogados y magistrados.
En Honduras, todo abogado debe recibir capacitación en materia de seguridad, elegir los casos que representa y descartar todo caso que pueda generar peligro ya sea debido a la personalidad de las partes o de las temáticas implicadas
Esta situación no se ajusta a la misión del abogado y ha sido denunciada por conllevar graves consecuencias sobre la capacidad de los profesionales del derecho a llevar a cabo sus funciones de manera libre e independiente.
Le invitamos a difundir también ampliamente el póster de la campaña (véase aquí adjunto) y apoye nuestras acciones en las redes sociales #UIAforLawyers
Para saber más sobre el Día del Abogado en peligro:
http://dayoftheendangeredlawyer.eu/ (Inglés)
http://www.idhae.org/Observatoire-DEL2016.htm (Francés)